Hace no mucho tiempo, concretamente un par de semanas, integrantes de Human Rights Watch, habían pedido expresamente al Gobierno de Tanzania que elimine todos los registros de trabajo en niños que pudieran existir, y en tal sentido, ante la falta de respuesta de las autoridades, el pedido se ha repetido nuevamente.
“Tanzania cuenta con leyes estrictas que prohíben el trabajo infantil en la minería, pero el Gobierno ha hecho muy poco para hacerlas cumplir”, señaló en aquel momento la investigadora asociada de HRW para los derechos de los niños, Janine Morna, quien denunció que miles de pequeños son obligados a trabajar en este país africano.
Hay que destacar, en este aspecto, que la mayoría de los niños, en algunos casos incluso menores de diez años, son explotados como trabajadores en las minas de oro del país, y obviamente no cuentan con ningún tipo de derecho que pudieran ejercer, partiendo de la base de que, como es evidente, no tienen ni siquiera derecho a la niñez.
El problema es que muchos de estos chicos son huérfanos o están en situación de vulnerabilidad, por lo que si no son las autoridades las que velan por ellos, es sumamente complicado que puedan hacer algo por defenderse. Veremos ahora si las amenazas internacionales terminan surtiendo efecto en este aspecto.